En Inglaterra est&n investigando una nueva técnica para conseguirlo. La idea se basa en usar tubos de goma llenos de agua marina, que flotan a cierta profundidad en el océano enfrentándose a corrientes y oleajes que los deforman. Esas deformaciones viajan por el tubo de goma hasta un extremo que contiene una dinamo que se mueve gracias a la energía que lleva la deformación, generando corriente eléctrica.
La idea es muy simple, pero parece que ofrece un gran potencial. Ahora están trabajando con prototipos pequeños, de unos pocos metros de largo en tanques que simulan oleaje, pero un modelo real de unos 7 metros de ancho y 200 metros de largo podría llegar a producir un megawatio de energia, suficiente para unas 2000 casas.
Sus otras ventajas es su resistencia a las inclemencias marinas, léase corrosión y daños físicos, gracias a su estructura flexible y a la menor exposición de partes mecánicas a la corrosión marina. Una de las competencias de este proyecto es el sistema Pelamis, que se está probando en Portugal, y del que hacen mención comparativa en el artículo de New Scientist.
Fuentes: Gizmondo, New Scientist
«Enfrenta el riesgo y duplica la ganancia». Soy un investigador de empresas startups e inversores en la bolsa. Desarrollo estrategias en el mercado de divisas y trabajo como periodista economista.