En Mundo Protegido hemos hablado en reiteradas ocasiones sobre el peso que tienen las nuevas tecnologías en la vida cotidiana, algo que aplica tanto para los adultos como también para los adolescentes.
La gran mayoría de los acontecimientos más importantes suceden en el terreno digital, tanto en la vida privada como en la vida pública. De hecho, redes sociales como TikTok concentran aproximadamente 2 horas de uso diario en los más jóvenes.
Por supuesto, existe una gran cantidad de debates en torno a los efectos negativos de las redes sociales en los adolescentes. En este artículo, nos interesa adentrarnos en el uso saludable de las mismas, ya que puede aportar grandes beneficios en torno al aprendizaje, la sociabilización o aptitudes que luego serán claves para el ámbito laboral y académico.
A continuación, lo que se necesita para saber cómo ayudar a los adolescentes a tener un uso saludable de las redes sociales, ya sea desde la aplicación de herramientas digitales a consejos apuntalados en la psicología.
Prueba ahora Qustodio para monitorear el uso de redes sociales de tu hijo/a¿Qué beneficios aportan las redes sociales a los más jóvenes?
Es sabido que las redes sociales se han creado hace dos décadas con el fin de que las personas tengan un lugar para interactuar ente sí, creando nuevas experiencias y compartiéndolas con los demás. En ese sentido, los adolescentes suelen hacer un uso extendido de estas plataformas para comunicarse entre ellos, además de encontrar una enorme cantidad de material educativo y entretenido.
En general, las redes sociales pueden ser una herramienta, que bien utilizada, aporta grandes beneficios, como el sentirse parte de una comunidad y mantenerse actualizado en torno a lo que sucede.
De acuerdo a la mirada de algunos expertos, también puede ser clave para desarrollar habilidades de sociabilización, comunicación y liderazgo para luego aplicarlas en otros entornos de la vida.
Si se siguen las últimas tendencias en investigación, ayudar a los adolescentes a tener un uso saludable de las redes sociales permite promover tanto la salud mental de los más jóvenes, así como también su educación.
A continuación, algunos beneficios específicos de un correcto uso de las redes sociales en los más jóvenes.
Construir una plataforma
Las redes sociales pueden ser un gran catalizador de talentos en los adolescentes y niños, ya que muchas veces les permite crear y compartir sus trabajos con los demás.
El interés por distintas disciplinas artísticas, por ejemplo, suele descubrirse gracias a las redes sociales en la actualidad, al mismo tiempo que permite conectar con otras personas interesadas en el ambiente artístico para crear una red de contactos y hasta un grupo de trabajo conjunto.
Activismo
En el último tiempo han surgido importantes figuras jóvenes en el marco de la política y los debates sociales. Las redes sociales han potenciado el sentimiento de participación de los más jóvenes, a la vez que les ayuda a que sus voces sean escuchadas para marcar la diferencia.
Muchas causas como el cambio climático o la lucha contra el hambre encuentran en plataformas como Instagram o Twitter un gran canal para concientizar a los demás. De esta manera, los más jóvenes pueden descubrir no solo los problemas del mundo actual, sino también qué pueden aportar para cambiar la situación.
Armar una comunidad
Por último, y para nada menos importante, las redes sociales ayudan a armar una comunidad en la que se compartan gustos, inquietudes, proyectos y más. Esto ayuda a que muchos niños y adolescentes descubran que no se encuentran solos con sus problemas o intereses, sino que hay más personas que pueden estar atravesando un momento similar.
En ese sentido, las redes sociales pueden armar un sentido de pertenencia para muchos jóvenes que de otras maneras podrían sentirse marginados.
¿Cómo ayudar a los adolescentes a tener un uso saludable de las redes sociales?
Sabiendo, entonces, que existen tantos aspectos positivos como negativos en las redes sociales, es importante poseer una estrategia que ayude a que tanto nuestros hijos como cualquier adolescente cercano puede sacar el mayor provecho de las redes sociales y evitar cualquier clase de consumo negativo de las mismas.
De acuerdo a las últimas tendencias en estudios e investigaciones, desde Mundo Protegido compartimos una serie de consejos, recursos y herramientas que permitan tener un uso saludable de las redes sociales sin necesidad de prohibirlas ni censurarlas.
Herramientas digitales de bienestar y monitoreo
Como no podía ser de otra manera, queremos comenzar con el uso de lo último en tecnología de control parental y cuidado de los más jóvenes. Estas herramientas son especialmente útiles para los niños o adolescentes que tienen un uso excesivo de las redes sociales.
Compañías como Qustodio, de la cual hemos hablado en Mundo Protegido en varias ocasiones, permiten fijar límites de tiempo, así como filtros que mantienen lejos a los más jóvenes de contenido no deseado.
Sin dudas, un gran aliado para ayudar a tener un uso saludable de las redes sociales en los tiempos que corren.
Establecer tiempos y espacios sin dispositivos
Vinculado al uso de herramientas digitales, establecer espacios de la casa o tiempos sin dispositivos en consenso con ellos también es una gran manera de crear hábitos saludables, así como fomentar actividades al aire libre o que requieran el uso de habilidades físicas, por ejemplo.
También se pueden emplear estrategias como espacios de la casa en la que no se puedan usar dispositivos, como puede ser la hora de comer. Es importante que tanto los adultos como los jóvenes respeten dicha norma, ya que es una forma de romper la burbuja de las redes sociales y fomentar la comunicación e interacción en la vida real.
Crear un feed positivo en las redes sociales
Cuando notamos que los más jóvenes se encuentran expuestos a contenido que los afecta, es momento de repensar el feed de las redes sociales y dejar de seguir algunas cuentas en redes sociales. Problemas como el trolling, el bullying o la comparación constante pueden sentirse muy reales en los niños y adolescentes.
Para evitar ello o, al menos, disminuir su impacto, conviene asegurarnos de crear un feed más positivo y valioso para ellos.
Por supuesto, no evitará su interacción con noticias no deseadas o que puedan afectarlos, pero creará un entorno mucho más amable y esperanzados para luego poder responder ante las malas noticias, con un gran impacto para el ánimo y la salud mental.
Seguir cuentas variadas
De la mano con el punto anterior, asegurarnos de que los más jóvenes sigan a una variedad de cuentas en sus redes sociales ayudará a que posean una mejor representación de la realidad.
En los tiempos que corren, poseer distintos puntos de vista ayuda a que puedan tener su propia opinión y no ser manipulados.
Por ejemplo, es recomendable hablar con los más jóvenes sobre la necesidad de informarse por múltiples fuentes antes de emitir un juicio o sacar una conclusión. Seguir distintos referentes o medios de comunicación es una buena manera de empezar.
Una comunicación fluida
Por último, es importante tomarse el tiempo de hablar con los más jóvenes para ser conscientes de cómo se sienten mientras usan las redes sociales. Si sus respuestas transmiten tristeza, enojo o preocupación, capaz sea momento de establecer cambios en la rutina y hábitos con los dispositivos.
Es por eso que muchos psicólogos infantiles y especializados en adolescencia recomiendan establecer un diálogo frecuente y sincero para ayudarlos a conectar mejor cuerpo y mente.
De esta manera, podrán establecer sus propias conclusiones sobre el uso de las redes sociales y los efectos que les causan.
¿Qué hacer ante el uso excesivo o perjudicial de las redes sociales?
Dicho todo esto, ante la sospecha de que nuestros hijos o jóvenes cercanos pueden estar expuestos a usos poco saludables de las redes sociales, el gran primer paso es poder hablar con ellos de manera directa y comprensiva. Mantener la calma y escucharlos permitirá el espacio para poder aconsejarlos y establecer estrategias conjuntas.
En esa dirección, se pueden crear plantes de uso de redes sociales en las que se planifiquen tiempos determinados, espacios libres de dispositivos o qué cuentas conviene seguir en las diversas redes sociales, tal y como hemos comentado.
También se puede acudir a la ayuda de recursos digitales, como la aplicación de control y monitoreo Qustodio.
Después de todo, es probable que los más jóvenes sigan un plan en los que ellos han sido parte de su creación. Tampoco se debe pasar por alto que tanto padres e hijos se encuentran en el mismo equipo y tienen el mismo objetivo: establecer cómo tener un uso saludable de las redes sociales y reducir al máximo sus impactos negativos.
Esto derivará en una mayor salud mental en los más jóvenes y el mejor desarrollo de sus aptitudes e intereses.
Prueba ahora Qustodio para monitorear el uso de redes sociales de tu hijo/aComo los 4 fantasticos: dedicación, paciencia, seguridad y efectividad, son los pilares de mis estrategias y formas de razonar en mis inversiones y economía del día día.