¿Cómo se puede configurar una VPN en el router WiFi?. La seguridad en internet es sumamente importante y las VPN son buenos aliados para mantenerla, sin embargo, instalar uno en cada dispositivo que uses es algo tedioso.
Además, si necesitas acceder a contenidos restringidos en tu país, pero no quieres tener que instalar una VPN en cada equipo que uses, en este artículo te explicaremos cómo configurar un VPN en el router WiFi.
Prueba ahora nuestra VPN recomendada ExpressVPNLas apps de VPN (Virtual Private Network) sirven para crear una red privada virtual que te permite conectar tu dispositivo a internet a través de un servidor intermediario, que puede estar ubicado en cualquier otra parte del mundo.
De esta forma, tu dirección IP (el identificador único de tu dispositivo en Internet) se oculta, y se muestra la del servidor de la VPN que tengas activado.
Normalmente, para usar una VPN debes instalar una aplicación en cada uno de los dispositivos que quieras proteger, como tu ordenador, móvil, tablet, etc.
Además, hay algunos dispositivos que no son compatibles con las aplicaciones de VPN, como las consolas de videojuegos, los televisores inteligentes o los dispositivos IoT. Esto significa que no puedes protegerlos con una VPN, y quedan expuestos a los riesgos de internet.
La solución a estos problemas es configurar una VPN en el router WiFi, que es el dispositivo que se encarga de distribuir la conexión a Internet a todos los dispositivos de tu red doméstica. De esta forma, todos los dispositivos que se conecten al WiFi estarán protegidos, sin necesidad de instalar ninguna aplicación adicional.
Ahora que ya sabes qué es una VPN, y por qué es conveniente configurarla en el router WiFi, te explicaremos cómo hacerlo.
Antes de empezar, necesitas tener lo siguiente:
Aunque parezca lo contrario, la verdad es que no todos los routers WiFi son compatibles con VPN, así que tienes que comprobar si el tuyo lo es. Para ello, puedes consultar el manual de usuario de tu router, o buscar en Internet el modelo y la palabra VPN.
Si tu router no es compatible, tendrás que comprar uno que lo sea, o instalar un firmware alternativo, como DD-WRT o Tomato, que te permita usar VPN en tu router. Sin embargo, esto puede ser complicado y riesgoso, así que esta opción solo es recomendable si tienes experiencia y conocimientos técnicos previos.
Hay muchas opciones de VPN en el mercado, pero no todas son iguales. Algunas son más seguras, más rápidas, más baratas, o tienen más servidores disponibles.
Para elegir la mejor VPN para ti, tienes que tener en cuenta el precio, la velocidad, la seguridad, la privacidad, entre otros factores.
Una VPN que cumple con todos estos requisitos, y que además es muy recomendable, es ExpressVPN, una de las VPN más populares y confiables del mercado.
Para configurar una VPN en el router WiFi, necesitas acceder a la interfaz de administración, que es una página web donde puedes cambiar los ajustes del dispositivo, por lo que necesitarás un ordenador que esté conectado al router WiFi, ya sea por cable o por red inalámbrica.
También necesitarás saber la dirección IP del router, que es un número que lo identifica en la red. Si no sabes la dirección IP, puedes buscarla en el manual de usuario, o en la pegatina que suele estar en la parte trasera o inferior del router.
También necesitarás saber el nombre de usuario y la contraseña para ingresar en la interfaz de administración. Si no los has cambiado, suelen ser algo como admin y admin, o admin y password.
Si no los sabes, puedes buscarlos en el manual de usuario, o en la pegatina del router. Si los has cambiado y no los recuerdas, tendrás que resetear el router a los valores de fábrica, lo que borrará todos los ajustes que hayas hecho. Asimismo, tendrás que volver a configurar el router desde cero.
Una vez que tengas todo lo necesario, sigue estos pasos comenzar con la configuración:
Para comprobar que la VPN está funcionando como debería, puedes hacer lo siguiente:
Puedes usar una página web como WhatIsMyIPAddress.com para ver tu dirección IP actual, y comprobar que coincide con la del servidor de VPN que has elegido.
Si no coincide, puede que la VPN no se haya conectado correctamente, o que haya algún problema con el servidor de VPN. En ese caso, puedes intentar cambiar de servidor, o contactar con el soporte técnico de tu proveedor de VPN.
Es normal que la velocidad se reduzca un poco al usar una VPN, ya que los datos tienen que pasar por un servidor intermediario, pero no debería ser una diferencia muy grande.
Sin embargo, si ocurre que la velocidad es muy baja, puede que el servidor de VPN esté saturado, o que haya algún problema con el router WiFi. En ese caso, puedes intentar cambiar de servidor, o ajustar los parámetros del router WiFi.
Otro método que puedes probar es a acceder a alguna página web, aplicación, servicio de streaming, juego, etc. que esté bloqueado o censurado en tu país o región, y comprobar que puedes acceder sin problemas.
De ocurrir que no te permita acceder, puede que la VPN no esté funcionando correctamente, o que el contenido esté bloqueado por otros medios. En ese caso, puedes intentar cambiar de servidor, o usar otro método para acceder al contenido.
Aunque las VPN gratuitas pueden parecer una opción atractiva para aquellos que buscan proteger su privacidad online sin incurrir en costes, es esencial estar consciente de los peligros asociados con el uso de estos servicios.
La seguridad puede ser comprometida al utilizar una VPN gratuita. Estos servicios suelen financiarse mediante la recopilación y venta de datos del usuario, lo que va en contra del propósito principal de una VPN: proteger la privacidad.
En lugar de ofrecer una capa adicional de seguridad, algunas VPN gratuitas pueden convertirse en una amenaza al comprometer la confidencialidad de la información del usuario.
Además, las limitaciones en términos de ancho de banda y velocidad son características comunes de las VPN gratuitas. Estos proveedores a menudo ofrecen servicios con velocidades más lentas y restricciones en la cantidad de datos que se pueden transferir, lo que puede resultar en una experiencia de navegación deficiente y frustrante.
Otro riesgo asociado con las VPN gratuitas es la presencia de anuncios molestos y, en algunos casos, malware. Dado que estos servicios dependen en gran medida de ingresos publicitarios para mantenerse gratuitos, los usuarios pueden encontrarse bombardeados con anuncios no deseados, lo que afecta negativamente la experiencia en internet.
Además, algunas VPN gratuitas han sido vinculadas a la distribución de malware, comprometiendo la seguridad de los usuarios y sus dispositivos.
Asimismo, la falta de transparencia en las políticas de privacidad y la ausencia de un compromiso claro con la protección de datos son otras preocupaciones importantes.
Algunas VPN gratuitas pueden no tener políticas sólidas sobre la retención de datos, lo que podría resultar en la retención y uso indebido de información personal del usuario.
Para una protección efectiva de la privacidad y seguridad online, a menudo es aconsejable invertir en un servicio de VPN de calidad que garantice transparencia y confiabilidad en sus prácticas.
Existen varios indicadores clave que puedes tener en cuenta para evaluar la seguridad de tu VPN y determinar si cumple con los estándares necesarios.
En primer lugar, es esencial revisar la política de registros de la VPN. Una VPN segura debería tener una política de no registro o, en todo caso, limitar la recopilación de datos al mínimo necesario para mantener la calidad del servicio.
Las VPN que no almacenan registros, garantizan un mayor nivel de privacidad, ya que no retienen información que pueda ser utilizada para identificar a los usuarios o rastrear sus actividades en la red.
Otro aspecto clave es el tipo de protocolos de seguridad que utiliza la VPN. Los protocolos como OpenVPN, IKEv2/IPsec y WireGuard son considerados seguros y confiables.
Asimismo, la ubicación de los servidores de la VPN también es un factor importante. Opta por servicios que tengan servidores distribuidos en diferentes países y regiones para garantizar una mayor flexibilidad y la capacidad de eludir restricciones geográficas, pero recuerda que es crucial asegurarse de que la VPN no tenga servidores en países con leyes de retención de datos estrictas, ya que esto podría comprometer la privacidad de tus datos.
La encriptación es otro componente crucial de una VPN segura. Asegúrate de que la VPN utilice una encriptación sólida, preferiblemente AES-256, que es considerada prácticamente impenetrable, lo que garantiza que tus datos estén protegidos mientras viajan a través de la red, incluso en entornos en los que la seguridad podría ser comprometida.
Además, investiga sobre la reputación y la trayectoria del proveedor de la VPN. Lee reseñas de usuarios, verifica su historial de seguridad y asegúrate de que el proveedor no tenga antecedentes de incidentes de filtración de datos o vulnerabilidades.
Para determinar si tu VPN es segura, evalúa la política de registros, el tipo de protocolos utilizados, la ubicación de los servidores, la calidad de la encriptación y la reputación del proveedor. Al prestar atención a estos factores, puedes tomar decisiones informadas y garantizar una experiencia online segura y privada.
Prueba ahora nuestra VPN recomendada ExpressVPNGustavo Yuste nació en Buenos Aires en 1992. Es Lic. en Ciencias de la Comunicación (UBA) y periodista. Colabora para distintos medios vinculados a la tecnología, informática, y la seguridad online en sus diferentes variantes.
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Acabo de terminar de configurar mi VPN en el router, no ha sido nada facil, mil gracias Gustavo por tu guia detallada.